El mantenimiento y la reparación de concentradores de oxígeno son aspectos críticos para garantizar su eficacia y seguridad. El mantenimiento regular de los concentradores de oxígeno es esencial para asegurar su funcionamiento óptimo y prolongar su vida útil. Esto incluye la limpieza periódica de los filtros y componentes internos, así como la verificación de la presión y el flujo de oxígeno para garantizar que cumplan con las especificaciones del fabricante.
La inspección regular de los concentradores de oxígeno es esencial para detectar cualquier signo de desgaste o daño en los componentes clave. Esto incluye la revisión de las conexiones, mangueras y válvulas para garantizar su integridad y funcionalidad. Además, se deben realizar pruebas de rendimiento periódicas para verificar que el dispositivo esté suministrando la concentración de oxígeno adecuada.